observando mi diálogo interior

No me quiero engañar. Hace poco, leí del blog de Concha Barbero, que estuviéramos alerta y fuéramos conscientes de identificar qué comentarios y voces vienen de los demás o de cosas aprendidas y cuáles salen realmente de nosotros mismos. Reflexionando sobre esta cuestión me ayuda a estar alerta y ser consciente de mis pensamientos y emociones, que son producto de mi ego y no de mi Ser.

Esta semana ha sido para mí muy ajetreada a nivel emocional, incluso me encontraba en ocasiones mareada y aturdida. Y es que han venido señales de todas partes que han despertado algo que residía dentro de mí, un sueño por cumplir. Me aconsejó sabiamente una amiga que me quedara quieta, que no hiciera nada y eso he hecho. Y las cosas vuelven a estar como estaban.

¿Decepcionada? Pues la verdad es que algo sí y sobre todo confundida. No entiendo nada pero intento aceptar las cosas como son porque ya son.

Y hace un rato estaba leyendo y meditando en silencio un texto que decía "hasta que no nos abandonemos a lo que hay, sin resistencias internas, no podremos vivir la realidad de manera más profunda, ser uno con el ahora".
¡¡Resintencias internas!! Pues las tengo tan dentro que no era ni conciente de ellas.

No quiero juzgarme ni juzgar la situación, quiero no resistirme. Pero es algo que tengo dentro de mi mente pensante, que desconfía del ahora y me dice que para ser alguien tengo que lograr tal cosa (absurdo, lo sé, pero ahí está) ¿De dónde viene ese pensamiento tan primitivo, tan arraigado? ¿De mí o de lo que he escuchado?
Sólo me queda ver ese pensamiento y dejarlo pasar...tan sólo es un pensamiento!
Sólo me queda acallar mi mente y estar presente en este momento.